Mujeres policías en el centro (2008)

"Quisiera que se sepa que las mujeres policías tenemos problemas y res- ponsabilidades como cualquier persona. No por traer uniforme somos diferentes."

 

En un inicio nos propusimos solamente promover el derecho a la cultura y el disfrute de las artes con mujeres policías, pues la apropiación de ese derecho humano en poblaciones excluidas y la modificación de políticas culturales, desde una perspectiva de equidad e igualdad social, es el propósito de Territorios de Cultura para la Equidad en alianza con FUGA, A.C. Estamos convencidas de que la cultura es un instrumento de ampliación de la democracia.

Sometimos el Proyecto “Mujeres Policías en el Centro” al concurso del Programa de Coinversión del Gobierno del Distrito Federal y logramos recursos financieros, así como el apoyo institucional necesarios.

A pesar de tener largos años de activismo dentro del movimiento feminista y civil mexicano, no habíamos tenido la oportunidad de relacionarnos con mujeres policías aunque se encuentren en todos los rincones de nuestra ciudad. Poco sabíamos de sus condiciones de vida y de trabajo, nos motivaban fantasías e ilusiones cándidas. Partimos de la convicción de que la seguridad pública es una demanda urgente de la ciudadanía y nos propusimos explorar este nuevo campo.

 

Con dichas intenciones llegamos al inicio del proyecto.

El 28 de mayo, día del arranque, nos encontramos con cuarenta polis muy jóvenes (de 19 a 29 años), uniformadas de gala, con pistola y tolete a la cintura y caras sorprendidas. Todas contaban con el permiso institucional para participar en este proyecto de la sociedad civil. Desde entonces, cada miércoles nos estuvimos reuniendo. Su interés y disfrute por la cultura e historia del país se palpaba a flor de piel.

En esas andábamos, cuando sucedió la tragedia de la Discoteque News Divine, donde murieron en un operativo policíaco nueve jóvenes, dos hombres de seguridad pública y una mujer policía de apenas veinte años quien, en cumplimiento de su deber, dejó en la orfandad a una bebé de cinco meses. Ese terrible suceso significó un parteaguas en el desarrollo del Proyecto.
A partir de diálogos intensos -sin abandonar las actividades planeadas- empezamos a entender las condiciones adversas de su labor diaria y las razones de la tremenda ruptura entre los cuerpos policíacos y la ciudadanía. Muy poco aprecio pueden sentir por la población que las agrede de día y de noche, en las marchas y en las esquinas, sin que puedan responder o defenderse legítimamente. Se sienten excluidas de los derechos humanos. La tensión es su pan de cada día. La corrupción es una relación en la que “tanto peca la vaca como quien le jala la pata”

Debatimos con ellas desde nuestra condición civil e intentamos combatir la visión de víctimas en ambas partes. Al final, llegamos al acuerdo de que la vida no es fácil y que las posibilidades de transformar esas relaciones adversas y dañinas son de ida y vuelta.

fases

 

 

Recorrido Histórico por el Centro para entrar en los recintos culturales -con puertas simbólicamente cerradas- y de esa manera poder aprender y gozar de las distintas épocas de la historia del país, poniendo énfasis en la participación social y política de las mujeres de antaño y de la actualidad.

Taller de Creatividad para la Escritura “El Cuerpo del Delito: Policía y Género” con el propósito de provocar el uso del lápiz y el papel para que las participantes expresaran sus motivaciones personales y experiencias laborales.

Sesiones de retratos fotográficos para ubicar visualmente cómo es su vida cuando están “francas”, así como captar su labor por las calles del Centro Histórico. Ellas decidirían cómo y en dónde querrían retratarse.

Divulgación de los resultados del proyecto dentro de la “Campaña 16 días de Activismo contra la Violencia hacia las Mujeres”, mediante una publicación y una exposición plástica que permitiera visualizar a las mujeres policías como sujetas de derechos.

Conoce los objetivos de este proyecto

Objetivo general

Contribuir a la construcción de una nueva cultura de seguridad pública, de disfrute y resguardo del patrimonio cultural junto con 40 mujeres policías que laboran en el Centro Histórico de la Ciudad de México

Objetivos específicos

Los objetivos específicos de esta iniciativa ciudadana acordados tanto con la Secretaría de Desarrollo Social como con la SSPDF fueron:

  • Favorecer el acceso a la creación y recreación de la historia y las artes a 40 mujeres policías como parte del ejercicio de sus derechos civiles y culturales para la defensa del patrimonio material e inmaterial del Centro Histórico de la Ciudad de México.
  • Incorporar la perspectiva de las condiciones de género y el papel que juegan las mujeres policías en el campo de las políticas de seguridad pública de la Ciudad de México.
  • Promover el acercamiento de las mujeres policías con la ciudadanía  a fin de fortalecer una nueva visión democrática de la seguridad pública y del resguardo del patrimonio cultural de la Ciudad de México.

publicación

El libro que tiene usted en las manos es el resultado de nueve meses de gestación, durante los cuales imaginamos, diseñamos, interactuamos, debatimos y disfrutamos con cuarenta mujeres policías de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, cuyo espacio laboral es el Centro Histórico de la Ciudad de México.

COORDINACIÓN GENERAL
Pilar Muriedas

INVESTIGACIÓN
Yanina Ávila

EDICIÓN
Maricarmen Velasco

«TALLER Y SELECCIÓN DE TEXTOS DE POLICÍAS
Berta Hiriart Marcela Guijosa

FOTOGRAFÍA
Guadalupe Velasco

FOTOGRAFÍA DE GRUPO Y RETOQUE FOTOGRÁFICO GENERAL
Ricardo Garibay

DISEÑO GRÁFICO
Silvia Olvera /Alfil Diseño, S. C.

Primera edición, 2008

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¿Para qué este libro?

Me gustaría que la gente se diera una idea de cómo es la vida de una mujer policía. Hay que tratar no sólo con una persona, sino con millones, y ya saben que las relaciones humanas son las más difíciles, aunque también las más gratas.

Quisiera que me vieran desempeñando mis labores sobre la zona de Reforma: dando vialidad, tratando de deshacer un nudo en pleno embotellamiento bajo la lluvia, o teniendo que cerrar calles cuando hay manifestación.

En ocasiones, la circulación está muy compacta y tenemos que sacarla aun contra los semáforos. Los automovilistas y los peatones se molestan y comienzan a insultarnos; no comprenden que es nuestro trabajo. Incluso han llegado a aventarnos los vehículos, a lesionarnos. Quisiera que se transmitiera un tipo de mensaje donde se comprenda al servidor público y se invitara al respeto por ambas partes.

Quisiera que se sepa que las mujeres policías tenemos problemas y responsabilidades como cualquier persona. No por traer uniforme somos diferentes.

autorretratos

 

 

ME ENCANTAN EL CAMPO Y LOS ANIMALES. Vivo en un pueblito donde aún hay paz y tranquilidad para poder caminar por sus calles. Aunque está algo retirado de mi trabajo, me gusta. Cuando tengo ánimos, me arreglo para tener una buena presentación. Me considero una gran pero gran señora.

 

SOY BAJITA, DE CABELLO RIZADO, de carácter cambiante, pero la mayoría de veces soy muy tranquila, soy justa aunque creo que ya no se puede en estos tiempos. Me encanta estar con mi hija, que me platique cómo le fue en la escuela, qué hizo durante mi ausencia, llevarla al parque a jugar y tratar de darle una educación predicada con el ejemplo. No me gusta que la gente nada más porque tiene dinero piense que puede comprarlo todo.

 

SOY AGRIDULCE COMO EL TAMARINDO porque a la mayor parte de las personas, cuando no me conocen, no les causo agrado, pero cuando me tratan piensan todo lo contrario. También mi color es parecido al de un tamarindo y mi cuerpo tiene las mismas curvas.

SOY DE VISTA MEDIA, PERO DE LARGO ALCANCE; del color de la tierra, mestiza, llena de vida. Mi cuerpo es metamórfico. A primera vista soy fuerte, incorrompible, doy vida y la protejo; pero en realidad cargo la envoltura equivocada, tengo el cuerpo feo, deforme, como las mariposas al nacer, con cara de larva, sin líneas de expresión definidas. Pero al pasar del tiempo me transformo. Al toque del viento en los poros de mi piel cambio, y me siento como oruga azul, me mimetizo dentro del hábitat en el que me encuentro para defender mi raza, mi ser y mi legado a los del mañana.

 

SOY COMO EL AGUA de un río que aunque pase por los acantilados más feos continúa, así, libre, y cada día lucha por ser una persona mejor, porque yo soy el ejemplo de mis hijos. Yo sólo me veo como quiero que mis hijos me vean, como una luchadora, porque no hay tiempo de perfeccionar mi persona.

PARECIERA SER UN ÁRBOL no acabado de crecer, de estatura media, ramas largas y delgadas, hojas naturales y corteza con pocos retoques hechos por el hombre. Estoy algo descuidado, me falta abono. Tengo ganas de madurar mis frutos al paso del tiempo, tengo exceso de aves en mis ramas. Mas no por eso mis retoños dejan de ser delicados como el viento, mi sonrisa linda como una estrella y mi cuerpo bello como una flor.

 

agradecimientos

Agradecemos sinceramente a las mujeres policías participantes en esta iniciativa civil, por su interés persistente en cada una de las acciones emprendidas conjuntamente y expresamos nuestro reconocimiento por la libertad mostrada para compartir su realidad cotidiana, sus enojos y sus sueños.

A Pati Patiño, Orfe Castillo, Conchita Martínez y Elvia Pérez por haber creído en este Proyecto desde sus orígenes y realizar todas las gestiones a su alcance -como funcionarias públicas- para apoyar la realización de nuestras actividades en condiciones favorables, sin burocratismos de por medio.

A Berta Hiriart, Marcela Guijosa, Carlos Alfaro, Carmen Gaitán, Guadalupe Velasco, Graciela García, Daniela Martínez, Silvia Olvera, Ricardo Garibay, Margarita Cruz, Paloma Escalante, Mar- garita Baz, Luz Maceira, Olivia Noguez y a todas las personas que brindaron generosamente sus conocimientos profesionales y sensibilidad ciudadana para cumplir con la misión emprendida.

A los museos del Templo Mayor, Claustro de Sor Juana, Mural Diego Rivera, Museo Nacional de Arte, Panteón de San Fernando, Memorial del Movimiento Estudiantil del 68, El Estanquillo y el Antiguo Colegio de San Ildefonso por su hospitalidad durante las visitas realizadas con las mujeres policías.

A la Dra. Alejandra Moreno Toscano, Autoridad del Centro Histórico, por brindarnos su apoyo para llevar a buen puerto nuestro Proyecto y por su incansable compromiso para promover el patrimonio histórico como un bien público disfrutable y seguro.

A la Secretaría de Seguridad Pública, Secretaría de Desarrollo Social y Secretaría de Cultura del Gobierno del Distrito Federal por confiar en nuestra apuesta de construir puentes entre la ciudadanía y las policías.